“Somos la policía más esencial que existe”
José Rodríguez Vacas, intendente de la Policía Municipal de San Blas Canillejas, deja el distrito para trasladarse a la Unidad de Protección Corporativa. Acaba de recibir la medalla al Mérito de la Cruz Blanca de la Guardia Civil.
Cómo recae en San Blas-Canillejas?
Solicité un destino a un distrito y me adjudicaron San Blas-Canillejas. Me encontré con una plantilla muy joven, con muchas ganas. Para mí era un sitio muy diferente porque venía de Alcalá de Henares y nunca había trabajado en Madrid.
¿Cómo encuentra el distrito, es un sitio conflictivo como en algunos sitios se dice?
No, no lo es. Como cualquier distrito, tiene problemas de ordenación de espacio público, de quebrantamiento de ordenanzas, como por ejemplo el tema de bebidas en la vía pública… Digamos que tiene un nivel medio de conflictividad.
¿Y no hay una leyenda negra con el tema de la droga?
La droga fue una lacra muy importante para San Blas-Canillejas en la década de los 80. Ahora tenemos pequeños focos. Eso es algo que ocurre en cualquier distrito. Hay algunos narcopisos, no muchos, algo de tráfico en las calles en lo que respecta al menudeo y algo de consumo en algunas zonas. Pero actualmente no podemos decir que haya un problema serio o importante de drogas en comparación con el resto de distritos de Madrid.
Hábleme de las ocupaciones y de la seguridad ciudadana.
En el primer asunto es uno de los distritos que tiene uno de los niveles más bajos de incidencia. Hay que tener en cuenta que no hay mucho apartamento turístico ni una población de edad muy avanzada. En cuanto a la violencia tenemos nivel bajo y nivel medio. Para que se me entienda, nivel extremo es el que exige una vigilancia absoluta y bajo en el que se produce un hecho y no hay más.
¿Qué es lo más destacado que ha hecho?
Al llegar establecí distintos grupos de trabajo y aumenté el número de personas en varios sectores de la unidad: la oficina, porque recepciona toda la información externa; la Oficina de Atención al Ciudadano, que es el departamento que tiene mayor relación con los vecinos (habitualmente no se encargan de servicios de patrulla para que se puedan centrar en este cometido); el servicio de agentes tutores, principalmente para la vigilancia en colegios; y la unidad de atestados.
¿Son una policía esencial?
Desde mi punto de vista somos la policía más esencial que existe. No voy a desmerecer a ningún cuerpo, por supuesto, porque todos tenemos que trabajar juntos y de la mano, pero la policía municipal es la que está en el distrito. Cubrimos desde todo aquello que es compartido con Policía Nacional y Guardia Civil hasta las materias exclusivas que tenemos asignadas.
¿En qué cambia su trabajo la presencia del Wanda Metropolitano?
El cambio es absoluto. En el día a día tengo que mantener con Policía Nacional, Delegación de Gobierno, y Guardia Civil por el asunto del tráfico. Por otra parte está el incremento policial que se produce un día de partido. Si, por ejemplo, en una mañana normal están trabajando 22 policías, en un día de partido (naturalmente estamos hablando de cuando el público puede acceder a los estadios) tiene que haber 140.
¿Esta solventado definitivamente el problema del tráfico?
Sí, aunque todavía se puede mejorar. Hay un par de proyectos más: la salida por el pinchazo de Luis Aragonés a la M-40 y un acceso doble en la avenida de Arcentales. Pero actualmente, con las medidas que estamos empleando, es suficiente.
¿En qué ha cambiado vuestro trabajo el Covid?
En todo. Se nos dio una competencia de policía sanitaria y a partir de ahí tuvimos que asumir una serie de cometidos para evitar contagios, que la gente saliera a la calle…
Le acaban de conceder la medalla al Mérito de la Cruz Blanca de la Guardia Civil.
Se me concedió gracias a una operación que hicimos conjuntamente con el Seprona relacionada con el robo de cartones de los contenedores. Hubo más de cien detenidos. Descubrimos quiénes eran, quién era el cabecilla y dónde se estaba produciendo la venta. Este hecho producía una pérdida anual al Ayuntamiento de cuatro millones de euros.