Árboles para los alcorques vaciados

San Blas-Canillejas es uno de los cuatro distritos en los que comenzará el plan de reposición de arbolado en aquellos alcorques que se vaciaron por defectos estructurales o por suponer un riesgo para la población. Cada oquedad tendrá su ejemplar siempre que cumplan las condiciones de viabilidad.

El Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento ha comenzado los trabajos para reponer 2.300 árboles en alcorques vacíos de San Blas-Canillejas, Barajas, Ciudad Lineal y Hortaleza. Con esta plantación se repondrán los ejemplares que se retiraron en su día por defectos estructurales o porque suponían un riesgo para la ciudadanía. La mayor parte se plantarán en alcorques viarios, aunque también hay unidades para alcorques corridos, terrizos y zonas ajardinadas. La intención es que todos los espacios que sean viables cuenten con su árbol y se ha ampliado el número de especies buscando fomentar la biodiversidad, siempre teniendo en cuenta las particularidades de cada entorno, aseguran fuentes municipales.

La mayor parte de los árboles se plantarán en espacios viarios aunque también hay unidades para alcorques corridos terrizos y zonas ajardinadas
La mayor parte de los árboles se plantarán en espacios viarios aunque también hay unidades para alcorques corridos terrizos y zonas ajardinadas

Para garantizar el correcto desarrollo vegetativo se aplicarán las técnicas más avanzadas con el fin de asegurar una plantación de calidad. Entre ellas se incluyen: extracción de un volumen de tierra suficiente para el desarrollo de las raíces, preparación del hoyo de plantación, sustitución de tierra, instalación de drenajes y de aireadores, implantación de la especie arbórea más adecuada en su marco de plantación, entutorado (colocación de un palo para evitar que se incline), dotación de los riegos necesarios y actuaciones posteriores para su consolidación.

Dado lo avanzado de la primavera y la llegada del calor, el ritmo de los trabajos estará condicionado a la situación climatológica de las próximas semanas, centrándose después las intervenciones en dejar preparados los alcorques para su plantación en otoño durante la parada invernal de la vegetación. Para la preparación del alcorque se excavará como mínimo un metro cúbico de suelo que posteriormente se rellenará con sustrato orgánico de calidad. Todos contarán con sistemas de drenaje sostenible para evitar el encharcamiento y favorecer el establecimiento del árbol.

Uno de los compromisos del Área de Medio ambiente y Movilidad es que todos los alcorques vacíos tengan su árbol. Por ello, antes de seleccionar los ejemplares que se van a reponer se analizaron las características y entorno de cada uno de ellos para valorar su viabilidad. Las posiciones que no cumplían con la normativa de accesibilidad y el resto de las condiciones técnicas están siendo clausuradas.

Algunos de los factores que determinan la inviabilidad a la hora de reponer un árbol, proponiéndose su clausura, son la falta de espacio por aceras estrechas, cercanía a pasos de peatones o de carruajes, interferencias con infraestructuras urbanas, como las farolas, marquesinas, señales de tráfico, contenedores, etc., o inconvenientes en el subsuelo, bien por falta de drenaje o por interferencias con otros servicios.

Especies apropiadas

Para asegurar la contribución de estos 2.300 ejemplares al patrimonio arbóreo de la ciudad, también se ha tenido en cuenta la especie, eligiendo la más adecuada para cada ubicación. Se ha valorado la disposición del espacio y el tamaño que cada árbol alcanzará en su etapa madura. Se han considerado todas las situaciones que pueden llegar a modificar el desarrollo de los árboles, como el tipo de calle, las particularidades del entorno, su proximidad a edificaciones, la presencia de interferencias con cualquier infraestructura, las horas de sombra o la dirección e intensidad de los vientos.

 

Para esta replantación extraordinaria se ha contado con el criterio de la diversificación incorporando 57 especies diferentes, entre las que destacan fresnos, robinias, sóforas, acacias, arces, manzanos ornamentales, almeces, paulonias, pinos, tilos o liquidámbar.

Con este amplio abanico de especies, el Ayuntamiento pretende potenciar el valor ornamental y paisajístico de la ciudad, además de fomentar la biodiversidad, un factor clave para asegurar su permanencia en caso de plagas o enfermedades graves.