“No debería haber ese nivel de agresividad en la Junta de distrito”
El hecho de que Recupera Madrid consiguiera representación en el Ayuntamiento como grupo ha conllevado que también la tuviera en el distrito. Jaime Rincón es el portavoz de esta formación en San Blas-Canillejas.
“Ahora decir San Blas es decir Madrid”
¿Cómo recaló en el distrito?
Soy madrileño nacido en Chamberí. Tengo 42 años. Llevo en el distrito desde enero de 2020, en el que cogí el traspaso de este restaurante. Aunque ya conocía al distrito ya que tengo amigos aquí, he jugado al fútbol en el polideportivo San Blas… Antes era el director de Operaciones de un grupo con muchos empleados y 40 restaurantes.
En el tiempo que lleva, ¿qué evolución ha observado en el distrito?
El distrito está bien. Desde que yo llegué a ha mejorado mucho en seguridad, en accesos, en transporte público… Se han hecho nuevos parques y polideportivos. Al decir San Blas hace unos años la gente se asustaba un poco. Ahora decir San Blas es decir Madrid.
Háblenos de la importancia que ha tenido Casa Carmela, su restaurante, durante la pandemia
La ha tenido y la tiene. Durante el confinamiento, cuando aún estaba acometiendo la reforma del local me conmovió ver a una señora de rodillas pidiendo delante del restaurante. Decidí poner la cocina a favor del barrio. Me puse en contacto con Agustina, presidenta de la Plataforma Vecinal Simancas, y con Alba y Aurelio, de la Plataforma de Trabajadores y Trabajadoras en Paro. En seguida nos pusimos de acuerdo. Anuncié en la web un menú solidario a 3 euros, que era el coste de la comida. Incluso hubo meses en el que me costó dinero. Ellos recogían los menús y se los llevaban a lo que para mí era la fila de la vergüenza para dar de comer a la gente. Poco a poco la gente empezó a demandar más menús. Así estuvimos meses, sin ningún tipo de ayuda. Los medios de comunicación empezaron a recoger la noticia, y mayor fue la demanda. Pues ya llevamos casi 38.00 menús. No paramos ni durante Filomena.
¿Por qué se mete en política?
Porque Marta Higueras, con la que comulgo al cien por cien, cuando me ofrece este cargo me da la libertad para ser independiente sin tener que estar sujeto a un relato.’ Defiende las cosas que sean buenas para el distrito’ me dijo. Poder estar de acuerdo con izquierda o derecha para lo que sea beneficioso y bajar el tono de agresividad es bueno. Odio el no por el no. Las juntas de distrito son un reflejo de Cibeles. Y todos tienen un relato. Pues si a mí un señor de Vox me dice que hay que arreglar esta calle, me parece tan válido como si me lo dice uno del PSOE o del PP. Y no debería haber ese nivel de agresividad en la Junta del distrito. Yo ya he ido a dos plenos y he sentido bochorno.
¿Cómo se llevan con Más Madrid?
Bien. Yo me llevo bien con todos. Con respecto a Más Madrid, se ha habido algún recelo, la verdad, no me he enterado.
A nivel municipal, ¿le parece bien la posición de su partido político con respecto a los presupuestos?
Cómo no voy a estar de acuerdo. Si no se hubieran aprobado los presupuestos tendríamos que haber seguido con los anteriores. Con los actuales, San Blas-Canillejas es el segundo distrito con más inversión. Que se ha pactado con el PP. Sí, para que se sacasen los presupuestos adelante y para echar a Vox de las instituciones. Dos vías muy importantes.
¿Cuál es el problema más importante del distrito?
Los problemas acuciantes con la llegada de la pandemia son los sociales. Es decir, ayudas a las familias, a los jóvenes y a las personas mayores. Cuando me dice el concejal del distrito me dice en un pleno que las cuatro cafeterías para mayores están cerradas porque no hay ninguna empresa que quiera lucrarse con las personas mayores, eso me chirría. Cuando hay jóvenes que no pueden ir a las formaciones del SEPE porque no tienen dinero para pagar el autobús para ir a Getafe, o a donde sea, me chirría. Cuando hay cientos de familias que necesitan ir a comedores sociales para comer, me chirría. Los colectivos que han sacado durante la pandemia a los barrios son los colectivos vecinales. Y en vez de fomentarlos, parece que queremos apartarlos y silenciarlos. ¡Qué fala de respeto tildar de chiringuito a una asociación que trabaja por y para los vecinos, independientemente de la ideología!
¿Qué opina del concejal presidente del distrito, Martín Casariego?
Le conozco poco. En la junta de portavoces es bastante didáctico y amable. En los plenos tiene una función política y es de un partido político que baja línea. Hay veces que me parece muy correcta su labor y otras mejorable. Aunque jamás en la vida hubiera hecho entrar en la sala a la policía para desalojar a Charo de un pleno. Lo habría hecho de otra manera.