Silvia Marsó ofreció el recital de poesía “La voz de su ama”
La actriz catalana entusiasmó al público congregado en el Centro Cultural Antonio Machado con “La voz de su ama”. Un espectáculo de poesía y canciones basado en trabajos realizados por mujeres. Tras su actuación Página del Distrito habló con la polifacética artista, que se mostraba muy satisfecha por la acogida recibida.
De qué trata “La voz de su ama”?
Fue una invitación de Ignacio García director de teatro, que inició unos ciclos de cultura, lenguaje y música en La Rioja, que se llamaban Voces de la Lengua. Trabajé con él hace cuatro años en la obra “24 horas en la vida de una mujer”, me invitó a participar y acepté encantada. En estos ciclos han participado artistas muy importantes como Carlos Hipólito, Manuela Velasco o Pepe Viyuela.
En esta oportunidad quise hacer algo que diese voz a la mujer, y de ahí surge el título de “La voz de su ama”, un recital de poesía hecho por mujeres desde el siglo XVI hasta nuestros días y en el que se habla de la ausencia de libertad en las mujeres. Incluso he incluido una creación mía, que hace referencia al cuadro “Las Planchadoras de Picasso”.
En este espectáculo estoy acompañada de Jorge Naranjo “Yorch”, músico sevillano que con su guitarra da sentido a los poemas que recito y también canta un par de temas.
En su larga trayectoria artística ha sido presentadora, actriz, cantante. ¿Con que genero se identifica más?
Hace bastante tiempo dejé aparcada mi faceta de presentadora. Me quedo con ser una actriz que canta y que también produce. En definitiva todo lo que tenga que ver con la interpretación. Quiero desarrollarme principalmente como actriz, aunque siempre he procurado no encasillarme en un género y ser muy polifacética.
¿Actualmente también está embarcada en un proyecto musical?
Así es. Hace siete meses que estrenamos un nuevo proyecto musical llamado “Blues and Roots”, con el que hemos recorrido diferentes salas de Madrid como Café Central, Clamores o Galileo Galilei. Tuvimos también la oportunidad de actuar en la Puerta del Sol con motivo de las fiestas del 2 de mayo. Próximamente tenemos previstas diferentes actuaciones por la Comunidad de Madrid. El 1 de julio en Torrelaguna, el 2 de julio en Perales de Tajuña y el 12 de agosto en Parla
¿Cuál es su mejor virtud?
Está mal que yo lo diga, pero creo que la constancia y el empeño en todo lo que realizo. La capacidad de ilusionarme con cada nuevo proyecto.
Silvia Marsó:
“Siempre he querido no quedarme encasillada en un género concreto y ser muy polifacética”.
Que soy demasiado perfeccionista. Me gusta que todo lo que hago esté muy bien hecho. Los que están a mi lado, lo saben e intentan dar lo mejor de cada uno.
¿Qué aficiones practica en su tiempo libre?
Muchas cosas. Me gusta la montaña, la natación, el pilates, el yoga. También pintar y sobre todo escribir. Me conectan con mi vida interior y me desconectan de la vida cotidiana.
¿Cómo está el momento actual del teatro?
Siempre se dice que el teatro está en crisis, pero nada mas lejos de la realidad. El teatro tiene la particularidad, de que siempre es en directo y la gente no prescinde de ir a presenciarlo. Esto no pasa en otros ámbitos como el cine, que se puede ver en cualquier plataforma desde casa. A quién le gusta, siempre irá al teatro porque el teatro nunca morirá.
¿Cuáles son los próximos proyectos?
Estoy acabando “La Florida”, un espectáculo escrito y dirigido por Víctor Sánchez Rodríguez, que se estrenó en Las Naves del Español durante el pasado mes de diciembre y en el que estamos ofreciendo las últimas actuaciones por diferentes puntos de nuestro país. El proyecto de “Blues and Roots”, será en el que más tiempo invertiremos este año.
¿Cómo se ha sentido actuando en el CC Antonio Machado?
Es un lugar que conozco y en el que tenía muchas ganas de actuar. Hace unos años me ofrecieron la oportunidad de ensayar una obra aquí, pero nos ofrecieron estrenar en el Teatro de la Abadía y finalmente nos trasladamos allí. Tenía una pequeña espinita clavada y he conseguido quitármela. Me he sentido muy a gusto y agradecida a todo el público asistente por el gran cariño y acogida dispensada.