Casa Manuela, cocina de casa en Las Rosas

Al entrar en Casa Manuela no puedes pasar por alto las rosquillas caseras con sabor anisado que se encuentran presidiendo la barra en un voluminoso tarro de cristal. De textura aterciopelada, con el punto exacto de dureza, son el mejor complemento para un café caliente recién hecho.

Diez años lleva Antonio Rodríguez capitaneando la nave y dando al cliente lo que pide, sin ambages, esto es, gastronomía doméstica, castiza como la que elabora una madre de familia en una cocina que siempre desprende efluvios de especias que remiten a otro tiempo, en las antípodas de lo que ofrecen los sofisticados gastro-bares, a base de emulsiones y esferificaciones.

“No trabajo con platos ya hechos, pre elaborados. Nuestro punto verdaderamente fuerte es la comida con mayúsculas, con buena materia prima, consideramos que la comida es lo más importante del día en una persona por eso procuro tener variedad en platos de cuchara, en pasta, en verduras…Ahora con el tema de los regímenes cada uno tiene una dieta distinta, no podemos tener un segundo de albóndigas en salsa con un atún encebollado; intentamos siempre alternar, dar opciones a tener también un pescado a la plancha o rebozado…”, explica este cordobés que lleva más de media vida en la capital de España haciendo lo que mejor se le da: servir al prójimo.

Casa Manuela, cocina de casa en Las Rosas

Calle Sofía, 46

Porque las cosas son como parecen, este restaurante emplazado en calle Sofía, 46 destila sencillez por todos sus poros. Desde su puesta en escena, acogedora, con mobiliario de madera y decoración sin estridencias, parecida a la de esos hogares de antaño que constantemente despedían un olor a fogón, a pucheros. El cliente que pisa el establecimiento ya sabe que juega sobre seguro, que si hace equilibrios lo hará con red. En pocos lugares del Madrid ofrecen un menú del día por 9 euros (10 en terraza) con unos espaguetis a la Carbonara que podrían haberse fabricado en Italia o el magnífico pastel de lombarda y queso o los cada vez más solicitados huevos de atún. No obstante, si hay un plato que hace las delicias del comensal más exigente y más en esta época de estío caracterizada por el sopor más despiadado, ese es el salmorejo, que Antonio, como cordobés nato, controla como nadie. “El secreto de un buen salmorejo cordobés es tener buena materia prima: unos tomates maduritos, un buen aceite de oliva extra, jamón serrano bueno y mucho cariño en la elaboración”, relata el responsable de esta aventura culinaria al tiempo que atiende a una clientela que empieza a acudir a sus dominios a cuenta gotas pero de manera escalonada.

Aunque el parroquiano tipo que entra en Casa Manuela suele ser del barrio de San Blas-Canillejas, cada vez son más los que acuden procedentes de otros distritos gracias a los cantos de sirena que desencadena el boca a boca. “Eso es un hecho, cada vez viene más gente a nuestro bar de fuera del distrito y eso es sobre todo por el boca a boca. Muchos fines de semana nuestro salón se pone hasta arriba de clientes porque tenemos un menú de 12 euros bastante suculento”.

Reconoce por tanto con cierto orgullo Antonio Rodríguez que los viernes, sábados y domingos “es complicado comer en Casa Manuela por la gran cantidad de demanda que hay”. Se debe señalar que el establecimiento se encuentra operativo desde las 8.00 de la mañana hasta las 12.00 de la noche, cerrando el miércoles por descanso del personal.

Casa Manuela, cocina de casa en Las Rosas

Influencia del Wanda Metropolitano

El traslado del Atlético de Madrid al Wanda Metropolitano no ha pasado desapercibido en el paisaje de San Blas-Canillejas. Son infinidad de bares los que se han visto afectados por los días de pre partido. Hordas de aficionados atléticos buscan un sitio para reponer fuerzas antes de cada partido de los del Cholo Simeone.

Casa Manuela no ha podido soslayar la enorme influencia del deporte rey: “Claro que hemos notado la presencia del Wanda Metropolitano en el distrito pero los clientes que venían antes a comer los fines de semana saben que viene el Atlético de Madrid y ya no vienen. Ahora es otro tipo de clientes el que acude a visitarnos, hemos perdido la clientela de toda la vida y hemos ganado una clientela de otro tipo. Hay gente que sufre al venir porque los días de partido es muy difícil aparcar por esta zona”, explica Rodríguez a la vez que pone un par de cafés cortados.

Casa Manuela, como colofón se ha ido convirtiendo durante el paso de estos diez años en toda una referencia de la restauración de calidad en Las Rosas, gracias a la experiencia y buen hacer de un profesional con muchos años de experiencia en el fatigoso mundo de la hostelería, Antonio Rodríguez, aunque su mujer también tiene mucho que decir.